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Manejar las emociones es un concepto complicado para muchos. Sin embargo, es fundamental desarrollar esta habilidad para poder orientarnos. El manejo de las emociones es fundamental para la toma de decisiones que contribuyan a nuestros objetivos.

Nuestras emociones actúan como ese GPS que debemos seguir para poder determinar nuestro rumbo. Ese que nos indica cómo adaptarnos a situaciones incómodas, o que no se ajustan a nuestras propias metas.

Además, las emociones nos ayudan a asegurarnos que las decisiones que tomamos sean las mejores en nuestro día a día.

El experto psicólogo, Abel Saraiba, nos comenta:

Abel Saraiba, @abelsaraiba, para atina

Identificar y honrar nuestras emociones nos ayuda a defendernos, cuidarnos y utilizar de manera constructiva las emociones que experimentamos. De esta manera, podemos aprovechar las emociones como las grandes aliadas que pueden ser en nuestra vida.

Igualmente, al reconocer una señal de emoción negativa, como la rabia, la podemos procesar, vivir y aliviar de la mejor manera, y así evitar que se transforme en ira y que nos perjudique en emocional y mentalmente.

¿Cómo identificar la rabia? Cuando la experimentamos, nos sentimos tensos, cargados, irritables y, en ocasiones reactivos. Sin embargo, incluso la rabia puede ser un motor para lograr algún objetivo que nos hayamos planteado en un momento dado.

Al reconocerlas, es mucho más sencillo manejar las emociones.

Para muchos, ponerle nombre a la sensación que experimentan sirve para minimizar su efecto y enfocarse en experimentar emociones más positivas.

Recuerda que aprender a manejar las emociones es también un acto de amor propio y de autocuidado. Uno de los hábitos más efectivos para lograrlo es la introspección e incorporar actividades en el día a día que contribuyan a nuestra sensación de bienestar. De esta manera, disminuye la reactividad en nosotros y podemos gestionar lo que sentimos de manera más efectiva.